El mantenimiento de nuestro carácter

"El alcance de lo que pensamos y hacemos está limitado por aquello que escapa a nuestra atención. Y debido a que no nos damos cuenta de que no nos estamos dando cuenta, es muy poco lo que podemos hacer para cambiar hasta que nos nos demos cuenta que no darnos cuenta le da forma a nuestros pensamientos y nuestros actos." R.D. Laing

Somos responsables de nuestra propia educación. No le debemos delegar esta tarea a nadie más. Si no nos apersonamos del desarrollo de nuestro propio carácter, seguiremos repitiendo los libretos que recibimos de los grupos sociales de los que hemos sido parte desde nuestro nacimiento. Debemos poner bajo la lupa todas nuestras convicciones de manera rutinaria para de esta manera poder evaluar su solidez.

Nuestra naturaleza individual está formada por nuestras creencias. Si sabemos en qué creemos y por qué lo creemos estamos en una mejor posición para responder de forma digna a cualquier tipo de intento de chantaje o abuso emocional o psicológico. En cuanto a los amenazas físicas, tenemos la responsabilidad de saber protegernos, a nosotros mismos, a nuestras familias y a nuestras comunidades. Es irresponsable encomendar este deber a terceros. 

Debemos rodearnos de personas que encarnen los valores que profesan. Debemos alejarnos de las personas que siempre están buscando un chivo expiatorio que explique el por qué de sus inconsistencias y sus faltas. Debemos apropiarnos de la inspiración y el resultado de nuestras acciones y si es preciso,  hacer los cambios necesarios para ser más consecuentes. 

Corrijamos nuestra historia.Escribamos nuestra historia.