"Si bien es cierto que siempre estamos llegando y partiendo, también es cierto que siempre estamos anclados. Nuestro destino nunca es un lugar sino una manera de ver el mundo." Henry Miller
El estoicismo nos sugiere aproximarnos a todas las cosas desde diferentes ángulos para evitar limitarnos a la conclusión apresurada de la primera impresión. La manera como vemos las cosas dependen más del estado de nuestra mente en un momento dado que de las cosas mismas. Por ejemplo, el no haber pasado el examen de ingreso a una universidad en particular, más que una tragedia irreparable puede convertirse en una invitación que nos hace la Providencia para abandonar los intentos mediocres de estudio y realmente aplicarnos.
El tener la capacidad de cambiar el foco con el que nos aproximamos al mundo, nos permite darnos cuenta de que podemos entrenar nuestras mentes para identificar las apariencias paralizadoras y reemplazarlas por perspectivas accionables de desarrollo.
Llevar a la práctica este tipo de estrategias no es un ejercicio sencillo. Exige un trabajo constante de observación que nos lleva eventualmente a tener que mirarnos con total honestidad en el espejo. Nos lleva a reconocer las mentiras que nos contamos, nos lleva a darnos cuenta de nuestras debilidades y nos lleva a darnos cuenta de nuestra responsabilidad por el estado de las cosas en nuestra vida.
Tomemos el trago amargo, demos gracias por la vida y hagámonos cargo de nuestra historia.
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